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Mucho cuidado: el truco de la lata para robarte el coche en menos de un minuto

¡Mucho cuidado! Así funciona el truco de la lata para robarte el coche en menos de un minuto
Janire Manzanas
  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

¿Sabes que en España se roban de media 37.000 coches al año? Los modelos favoritos de los ladrones son: Seat León, Seat Ibiza, Volkswagen Folf, Ford Focus, Peugeot 206 y Citroen Xsara. En cuanto a ciudades, Madrid, Barcelona y Sevilla son las que presentan un mayor número de robos. Teniendo en cuenta estos datos, es interesante conocer en qué consiste el truco de la lata que utilizan los ladrones para robar coches y del que alerta la Policía Nacional.

No es un método nuevo, pero ahora ha vuelto a tomar mucha fuerza. Los ladrones atan varias latas de conservas o de refresco a una cuerda en la parte posterior del vehículo, exactamente igual que se les hace a lo recién casados. Colocan la cuerda en algún elemento de los bajos del coche y lo ocultan para que cuando el conductor se suba al coche no vea las latas.

Una vez empiece a circular, nota un ruido extraño que le hace pensar que el vehículo tiene alguna avería. Lo más seguro es que detenga el coche para averiguar de dónde procede el ruido. Una vez se baja y se dirige a la parte posterior, los ladrones, que actúan en parejas y que han seguido al conductor a poca distancia, acceden al interior del coche y lo roban.

Un robo en cuestión de segundos y sin necesidad de utilizar la violencia, algo que los ladrones tienen muy en cuenta. Y es que, el artículo 242 del Código Penal establece que los delitos de robo con intimidación y violencia se castigan con penas de prisión de dos a cinco años. Sin embargo, al no utilizarla con el truco de la lata, se considera hurto y el castigo es de seis a dieciocho meses de cárcel.

Las técnicas más empleadas pos lo ladrones de coches

Lo ladrones utilizan una técnica muy avanzada para hacerse con los vehículos. Solo tienen que activar el inhibidor de frecuencia justo en el momento el que la víctima cierra el coche con el mando a distancia. Al anularse la orden, no se llegan a cerrar las puertas y pueden acceder al interior. Por este motivo, siempre que sea posible, es preferible cerrar el coche manualmente y, además, comprobar que todas las puertas están cerradas.

El truco del falso accidente funciona de una manera muy similar al de las latas. Los ladrones dan un pequeño golpe por detrás al vehículo de su víctima. Cuando ambos están fuera de sus coches para comprobar los daños, un cómplice aprovecha el descuido para hacerse con el turismo.

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